Nuestro refugio se ha ido construyendo a los largo de 25 años en una antigua zona de huertos y ante la necesidad de tener un lugar donde poder cuidar de los animales hasta que encuentren a su familia y los adopten.

Estamos siempre en mejora constante a fin de crear un entorno enriquecido para nuestros gatos, un espacio en el que conviven más de cuarenta gatos con historias muy diversas. La mayoría de ellos tuvieron, antes de llegar a nuestro refugio, una familia que en un momento dado decidió que ya no querían hacerse cargo y los abandonaron en la calle o bien han sido nacidos en la calle

Todos nuestros gatos están en adopción, están en nuestro refugio y los cuidamos lo mejor que podemos siempre esperando a que llegue una familia que les ofrezca un hogar donde ser felices.

Nuestra tarea diaria dentro del refugio es la limpieza, alimentación y cuidado del entorno y los gatos que viven en él.